El aumento del consumo de pescado pasa por ofrecer formatos fáciles de consumir y sostenibles
29 octubre 2025 - La acuicultura europea avanza hacia el uso de ingredientes alternativos y el desarrollo de nuevos formatos de productos orientados al consumidor final. Estas tendencias estuvieron presentes en el congreso Aquaculture Europe 2025, donde se abordaron aspectos clave relacionados con la regulación y la preparación de la normativa necesaria para incorporar nuevas materias primas a la cadena alimentaria, una condición indispensable para convertirlas en productos comercializables mediante la innovación.
Entre las líneas de investigación presentadas se observa una clara tendencia hacia materias primas circulares y sostenibles, así como hacia la reducción de subproductos y del desperdicio alimentario mediante el aprovechamiento integral de los recursos. El objetivo es mejorar la huella ambiental del sector, tanto en la fase de producción acuícola, como en la transformación de los productos destinados al consumo humano.
En el ámbito del comportamiento del consumidor, durante este evento europeo celebrado recientemente en Valencia, expertos expusieron datos sobre el consumo de pescado per cápita en distintos mercados europeos y propusieron estrategias para recuperar la demanda mediante la creación de productos en formatos más convenientes, como platos preparados, porciones listas para consumir o snacks proteicos.
“Es necesario adaptar los productos a los nuevos estilos de vida urbanos y a las preferencias y necesidades de los consumidores, ofreciendo formatos que permitan un consumo rápido y saludable”, explica Teresa Picó, jefa de la sección de Transformados del Mar de CTAQUA.
El consumidor y la conveniencia: retos y oportunidades
Una de las ponencias más destacadas fue la de Joan Riera (Kantar), quien subrayó la necesidad de transformar la materia prima acuícola en productos con valor añadido si el sector quiere ampliar su cuota en la cesta de la compra. Riera presentó evidencias sobre la caída del consumo de pescado en Europa y las estrategias necesarias para revertir esta tendencia (misPeces).
Según los datos expuestos por el experto, el consumo de productos del mar ha descendido, debido principalmente a las presiones de precio y a los cambios en los hábitos de consumo. En España, por ejemplo, muchos hogares han sustituido las proteínas de mayor coste como el pescado, por alternativas más económicas, como el pollo o el cerdo.
Para afrontar este reto, el sector debe ofrecer soluciones que respondan a otra de las principales demandas de los consumidores, la conveniencia. Aunque muchos manifiestan querer cocinar más, el tiempo dedicado a la cocina o a la compra de alimentos se ha reducido.

“En este sentido, los formatos fáciles de preparar se han convertido en uno de los principales impulsores del consumo. Este cambio plantea un reto para los sectores de la acuicultura y de los productos transformados del mar: ofrecer productos listos para consumir que resulten atractivos para las familias jóvenes, menos habituadas a comprar y manipular pescado fresco”, añade Teresa Picó.
En conjunto, las tendencias emergentes identificadas en Aquaculture Europe 2025 refuerzan la necesidad de orientar el sector hacia la economía circular y la sostenibilidad, adaptar los marcos regulatorios para acelerar la comercialización y la mejora de la calidad de los productos, y promover formatos de conveniencia capaces de atraer al consumidor urbano y aumentar el consumo de pescado. Estas conclusiones están respaldadas tanto por los abstracts y el programa técnico del congreso, como por la cobertura especializada posterior que recoge y sintetiza las principales recomendaciones de los ponentes y analistas del evento.
Tendencias globales y hábitos de consumo
Las conclusiones alcanzadas en el congreso europeo respecto a la conveniencia como una de las principales estrategias para incrementar el consumo de productos del mar, coinciden con las identificadas por otras fuentes internacionales. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) subraya que el mercado de alimentos convenientes está creciendo a nivel global y que, en el caso de los productos pesqueros, estos desarrollos pueden ayudar a superar barreras tradicionales de consumo, como la percepción de dificultad en la manipulación o la presencia de espinas. Según la FAO, la transición a formatos más accesibles, higiénicos y listos para consumir puede favorecer la aceptación del pescado entre nuevos segmentos de consumidores, especialmente en entornos urbanos con menor hábito de consumo de productos del mar.
En la misma línea, el informe “Seafood Reports: Understanding the Big Trends Driving Small Choices” (2025) señala que los factores estructurales como la urbanización, el aumento de hogares unipersonales y los estilos de vida acelerados están transformando los patrones de compra y generando una demanda creciente de los productos fáciles de consumir o de preparar. Por otro lado, medios especializados como The National Provisioner (2024) destacan que los sectores de la pesca y la acuicultura están respondiendo activamente a la tendencia mediante el desarrollo de productos de valor añadido como los filetes pre-marinados, bowls de pescado listos para microondas y presentaciones individuales refrigeradas, diseñadas para consumidores que priorizan la conveniencia sin renunciar a la calidad ni a las propiedades nutricionales del pescado.
Innovación y colaboración con el sector
En este contexto, “nuestra sección de Transformados del Mar se posiciona como un socio estratégico para las empresas de los sectores de la acuicultura y los alimentos del mar que desean afrontar estos retos y aprovechar oportunidades emergentes. Gracias a la infraestructura de la planta piloto y del laboratorio de tecnología de los alimentos, estamos preparados para acompañar a nuestros clientes desde la fase inicial del desarrollo de un nuevo producto, como las ideas de concepto, hasta un prototipo escalable industrialmente”, explica Teresa Picó.

CTAQUA, a través de esta sección, ofrece asesoramiento en el desarrollo de productos de alto valor añadido, en el aprovechamiento total de las materias primas para reducir pérdidas y desperdicio alimentario asociado a los subproductos, y en la optimización de las líneas de procesado para aumentar rendimientos, apoyando a las empresas en su transición hacia una producción más cercana a la economía circular.
“Nuestro enfoque práctico, orientado a los resultados, permite a las empresas ampliar su competitividad, responder a dinámicas de mercado y acceder a nuevos nichos, concluye.


